Bueno, pues continuamos. En esta ocasión conocemos la historia de la Mudita H, una historia un poquito triste.
Como ya sabemos de sobra que no puede hablar y no tiene sonido, nos dedicamos a practicar su grafía minúscula. Os dejo el cuento y la canción para que lo disfrutéis en casa y porque sobre él trata la tarea de esta semana que os he enviado 😉